contando cuentos

Unas de las cosas por la que la amazonia es famoza son los misterios que encierra, con todos sus mitos y leyendas, recuerdo cuando nos reuniamos con algunos vesinos, cuando los ultimos rayos de sol estaban por desaparecer y nos contabamos entre nosotros historias, esas que se pasan, que les conto el amigo de un amigo o el abuelo en sus ratos de osio, aqui les presento algunos,como el del ayahuasca, ese brebaje alucinógeno que según los “chamanes” te pone en contacto con los espíritus del bosque, o el legendario chullachaqui ese duendecillo con un pie mas pequeño que otro (o con una pata de venado según algunos) que se transforma en un ser querido para ti o algún conocido para hacerte perder en el interior de la inmensa selva o para vengarse si es que robaste alguna fruta de su magnifico huerto, no olvidemos también al tunche o al maligno, esos fantasmas de personas que se resignan a morir , que tienen algo pendiente en la tierra o por que han sido personas “malas” y no pueden entrar al paraíso, y siguiendo el recuento de estos místico seres encontramos al famoso bufeo colorado ese mítico animal que según los relatos en las noches de luna llena se transforma en un guapo joven que enamora a las jovencitas ( preferentemente a las que están en su mes) para luego dejarlas embarazadas y que alumbren a una cría de bufeo. Aquí les presento a algunos de estos fantásticos seres:
Yacumama: la madre de las aguas, es una enorme boa, se dice que avita en los aguajales y cuida muy bien su territorio.
Yacuruna: Es el espíritu más importante de los ríos y lagos de la selváticos. Es quien manda sobre todos los seres y espíritus del agua. Suele ser invocado para hacer el bien o el mal por los chamanes y curanderos en sesiones de ayahuasca. Se traslada por los ríos y entre en las cochas (lagunas) montado sobre un gran lagarto negro, adornado con cinturones y collares de boas y usando como calzado caparazones de tortugas "taricaya" o de "charapa".
La Runamula: Cuenta la leyenda que cuando una mujer comprometida tenía relaciones prohibidas con un cura, ésta se convertía por las noches de luna llena en una bestia, el hombre en un jinete negro y la mujer en una mula que escupe fuego por todos sus orificios, cabalga asustando con sus espeluznantes relinchos a los pobladores del pueblo o caserío. Los pobladores más valientes perseguían a la bestia para descubrir a qué lugar se dirigía cuando terminara el encantamiento, para así descubrir a la mujer infiel, la que era llevada donde un curandero para liberarla del hechizo mediante baños y ayahuasca.
El Ayaymama.:Una madre de una comunidad nativa, queriendo salvar a sus dos pequeños hijos de una mortal epidemia que diezmaba su comunidad, los llevó muy lejos en la selva y los dejó cerca de una quebrada con muchos peces y árboles frutales a su alrededor. Ellos comieron y se divirtieron todo el día allí, junto a la quebrada, pero en la noche empezaron a extrañar a su madre y partieron en su búsqueda perdiéndose en la selva.

Llorando de pena y miedo deseaban ser aves para volar donde su mamá. El dueño del monte (selva) tuvo pena y los convirtió en avecitas. Volaron hasta su pueblo pero vieron que todos habían ya muerto. Desde aquel día no dejan de volar y al posarse en algún árbol hacen oír su lastimero canto "Ayaymama... ayaymama... ayaymama..."

La Sirena. :Siempre vive solitaria en las profundidades de los ríos, pero en busca de un compañero suele subir a la superficie de una playa solitaria en donde canta. Se dice que si algún hombre escucha su canto será atraído hacia el lugar donde está la sirenita y no podrá resistirse a sus encantos. El hombre dejará todo y se irá con ella para siempre, desapareciendo en el río.

El barco fantasma: cuentan que una embarcación que navegaba por el amazonas fue tragada por la fuerza de esta y desde ese día deambula por los rios tratando de atraer a las personas a ser parte de la tripulación maldita

Como estos ahí miles de historias mas, si me e olvidado de alguno disculpen, pero son tantas historias que aria falta un libro extenso para resumirlas la mayoría, muchos dicen que son verdad, otros que son simples historias, algunos experimentaron estas historias otros esperan hacerlo para creer, personalmente en algunas cosas soy creyente y en otras no, a veces extraño esos tiempos, en los que la mayoría de niños se ponía a jugar en las calles o a contarse historias cuando la noche se acercaba, no existía tanta tecnología mas que un televisor o una radio y uno que otro videojuego, tratemos de no perder nuestras costumbres, no dejarnos desaparecer por un mundo globalizado, tratemos de convivir lo ancestral con lo moderno


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